¿Qué país tenemos? Energúmenos

En varios blogs se ha posteado sobre los disturbios de la Universidad Latina, en San José de Costa Rica.

En algunos se ha dicho que de donde proviene tanta agresividad de nuestros jóvenes, se debe a la frustración que sienten por toda la crisis de valores, crisis económica y social que se vive en nuestro país.

En lo personal no creo que la violencia se justifique de ninguna manera, el video exhibe una turba enardecida, porque no pudieron entrar a un concierto, y tuvieron que esperar horas y al final el cupo excedió la capacidad y no pudieron entrar.

Disturbios en la Universidad Latina



Creo que esto merece cárcel, sanciones económicas a los responsables, y un equipo de policías más preparado para enfrentar este tipo de disturbios.

Y que no me vengan a decir que estamos militarizando la policía, o que el gobierno está violando la libre expresión de nuestros jóvenes, ya que con solo ver las grabaciones de los disturbios, es simplemente criminal y destructivo, lo que esta masa de energúmenos hizo a lo largo de su trayecto.

Ya hay como dieciséis personas que van hacerle frente judicialmente, a los actos vandálicos que hicieron, y ojala todo el peso de la ley caiga sobre ellos, para sentar un precedente, y no creo que todo esto que se dio sea por falta de amor y de comprensión hacia nuestros jóvenes.

Es falta de esfuerzo, de estudio, de estar comprometido con el bien, y de cómo buscar como estudiar, y avanzar en una sociedad competitiva, que esta globalización nos heredo, a todas y a todos, y no seguir justificando este tipo de actos, que al final destruye todo a su paso, desde cosas materiales, y porque no, pudieron perderse hasta vidas de seres humanos.

Refuerzo este post de denuncia con una carta de mi estimado amigo Jáirol Núñez Moya:

No terminaba de sorprenderme por la reacción que la suspensión de un concierto produce en la juventud costarricense, y vuelvo por tercera vez en menos de dos años a ser testigo del país que tenemos. A un día de los disturbios de San Pedro, en las inmediaciones de la Ciudad de la Investigación - UCR, proveniente de una actividad académica, dos hombres motorizados revólver en mano sustraen mi celular. Mucho se habla de la seguridad ciudadana pero eso es lo menos que siento luego de situaciones como esa.

Estoy seguro igual le sucede a muchos/as costarricenses. La sensación de impotencia ante un arma y la vida en vilo, no se lo deseo a nadie. Pero tampoco quisiera esperar a que nos ofrezcan cielo y tierra en campaña para esperar tranquilidad (que de por si del dicho al hecho... es más que evidente no hay resultados). Pero mucho menos quisiera tener que hacer la de los jóvenes del concierto para ser escuchado. Si nos indigna lo sucedido, puede que nos indigne más la respuesta a la pregunta expuesta.

¿Entonces?