martes, 29 de junio de 2010

Todos los ticos tienen su 'diay'


Tienen los costarricenses el dilema de permitir o no la minería a cielo abierto en una rica zona boscosa en la parte norte del país. Tienen también clavada en su castellano una palabra demasiado reveladora: diay. Su traducción fuera de las fronteras ticas sería algo así como "no hay otra posibilidad", semejante al "es lo que hay" resignado de los españoles, pero mucho más interiorizado, más frecuente y más significativo.

El mundo entero sabe lo que es el oro, pero no el diay. Es una interjección, que no un adjetivo, repleta de resignación, de decepción, de conformismo, de consecuencia obvia, pero también de reclamo según se use. Y mire que es difícil captarle el tono, dicen los extranjeros cuando ya han logrado entender los significados y, por tanto, la forma de ser tica.

Dice el diccionario que diay es poco menos que una navaja suiza: sirve para expresar afirmación, interrogación, admiración, ignorancia o desconocimiento. Y también es una forma de saludar. Es cierto, pero en las calles de San José, en los atracaderos del Pacífico, en la humedad del Caribe o en la confusión de la frontera con Nicaragua, el diay abunda como única forma de decir algo cuando no se sabe qué decir. Nadie quedará comprometido y siempre queda un suspenso, un espacio en blanco para llenarse después o, mejor aún, para que lo llene otra persona.

Quizá pasa esto con un polémico proyecto minero en un país donde la minería metálica es tan marginal y presuntuosa como la industria aeronáutica. Costa Rica es una tierra que nunca ha sido rica en metales. En tiempos de la colonia era tierra inválida: ni oro ni mano de obra indígena. Eso explica el desarrollo con menos desigualdades sociales en relación con los países vecinos. Hay menos abolengo. O el que hay es menos rancio. Lo ciertísimo es que el oro es cosa rara y su extracción se asocia más al orero, el que se gasta las horas en los ríos buscando el oro de forma artesanal.Lo que viene no es una cuadrilla de oreros.


La extinción se paga con oro

El proyecto se llama Crucitas y pertenece a una empresa de capital canadiense (Industrias Infinito, SA) que acumula años tramitando sus permisos para comenzar la exploración en una zona boscosa y que en estos días despliega una intensa campaña publicitaria para intentar contrarrestar el considerable rechazo en una sociedad autodefinida como ambientalista. El Gobierno anterior lo declaró de interés público. La nueva presidenta, Laura Chinchilla, decretó la moratoria de nuevos proyectos, pero evitó la ruptura del contrato ya firmado con Crucitas porque, diay, podría provocar una demanda internacional millonaria.

El proyecto está ahora paralizado en instancias judiciales. La presión de grupos sociales y políticos se mantiene. Están organizando una caminata desde la capital hasta Crucitas, paso a paso los 170 kilómetros. La empresa inyecta más y más dinero en publicidad. El Gobierno hace malabares para no contradecir su discurso ambiental. La opinión pública mayoritaria parece estar opuesta, pero una manifestación masiva en Costa Rica es casi utópica. Todos tienen su propio diay.

ÁLVARO MURILLO 27/06/2010

6 comentarios:

Gizela dijo...

Que artículo tan bueno!!!!!
Me encanta el enlace del lingüístico diay, con la minería jajaja
De verdad lo leí varias veces...¡con ganas!
Y lamentablemente... lo de demandas internacionales, no es juego
Pero como dice el antipático dicho, el que hizo la ley, hizo la trampa
espero que logren poder salir de ese nudo contractual, y se frene el proyecto
Creo que en nuestro continente terminaremos por optar el referéndum, para los proyectos, referidos a nuestra minería.
Se les va "la hoya", a nuestros gobernantes, cuando sacan cuentas y ven muchos dólares
Pero no sé por que me "late" que lograrán parar ese proyecto.
Diay...tienen una presidenta mujer.
BESOTESSSSSSSSSSSSSS

WOLVERINE dijo...

Diay me despertò el temblor y diay no tenìa nada de sueño asì que me puse a leer un toque los blogs, esta tuanis este post y diay hasta Tio Conejos tenìa sus diays.

Salu2 de WOLVERINE.

Anónimo dijo...

Por cierto, ese tema de Crucitas nos concierne a todos los ticos, no entiendo aùn la posiciòn de Laura Chinchilla en este asunto, pero definitivamente no està favoreciendo en nada al pueblo costarricense si termina aprobando dicha minerìa, si nuesta presidenta no defiende nuestro patrimonio, diay ahora si nos llevarà el pisuicas bailando chingo.

Salu2 de WOLVERINE.

lichazul dijo...

que le vamos a hacer, es lo que hay decímos acá
esto me recuerda pascua-lama ,volaron el glariar y allí existe una explotación aurífera

y resulta que el agua acumulada en esos hielos milenarios...simplemente se fue por el caño político

besitos de luz

Marina dijo...

Dicotomía tras dicotomía...yo tb digo diay.
Gran problema = solución mala o solución peor.

Besos

Wílliam Venegas Segura (DW) dijo...

Roy:
el otro día estuve hablando con Geovanny Jiménez sobre su próximo novela (Garabito) y me enseñó documentos que demuestran la enorme cantidad de oro que se llevaron los españoles de C.R. una vez que derrotaron al líder indígena Garabito.