Los soldados fuera de la residencia del presidente de Honduras. El 28 de junio, el secretario privado del presidente, informó a la prensa que el presidente Manuel Zelaya había sido detenido por las fuerzas militares y llevados a la base aérea de Tegucigalpa.
Porque podemos definir a Honduras como una Banana Republic, termino desarrollado en la época de la guerra fría, cuando la antigua URSS colisionaba con los EEUU, en el patio trasero norteamericano, nada más y nada menos que en nuestra pequeña Centroamérica.
Pequeñas naciones con ejércitos bien entrenados contra la insurgencia comunista, la palabra mágica de la décadas del Siglo XX, llevada a su máxima expresión, guerras civiles en El Salvador en Nicaragua y Honduras, siendo estas naciones las más golpeadas por las guerras de baja intensidad que libraran las dos superpotencias de la época.
Usando estos territorios como campos de batalla que cobraron la vida de cientos de miles de seres humanos a lo largo y ancho del territorio centroamericano.
La ley del garrote que en sus años los EEUU desataron contra los países centroamericanos y a lo largo y ancho de Latinoamérica, que definieron a nuestro continente como el patio trasero, después vino la época de Ronald Reagan con un discurso anti comunista y de choque frontal con la antigua URSS, al grado que la pequeña Costa Rica fue invitada para que volviera a tener un ejército para luchar contra la insurgencia, algo que no se daba en nuestro territorio.
Mañana Honduras va a comicios después del golpe de estado ocurrido en su territorio, al escoger un nuevo presidente, salido después de un golpe de estado. Sera elegido por medio de los votos, pero será suficiente para que sea un presidente legitimo.
This poster depicts Honduran President Manuel Zelaya as a gunman. It reads: "No to Continuity" and refers to the fact that Zelaya was trying to extend his term in office beyond the single, four-year term that the Honduran constitution currently allows.
Este cartel representa el presidente hondureño Manuel Zelaya como un hombre armado. Dice así: No al continuismo; y se refiere al hecho de que Zelaya estaba tratando de extender su mandato más allá del solo término, de cuatro años que la Constitución de Honduras permite en la actualidad.
Ya el chorreo de votos no nos define un estado democrático, tiene que haber otras cosas en la que se sustente la democracia. Lo hemos visto con Hugo Rafael en Venezuela, donde ciertos sectores no legitiman al cien por ciento su presidencia a pesar que gana comicios, pero ha sacrificado a muchos sectores para mantenerse en el poder.
Estuvo los EEUU enterado o por lo menos informado de un golpe de estado en Honduras y ejecutado por las fuerzas armadas hondureñas. La nueva administración norteamericana ha dado claros indicios de una ambivalente política exterior en el caso de Honduras, al grado que ha ido justificando la situación hondureña, ya hoy sabemos que al reconocer las futuras elecciones en el país centroamericano da por legitimo al gobierno de facto que gobierna ese país. EE UU y Brasil discrepan sobre la validez de las elecciones en Tegucigalpa, Brasil, el gigante hemisférico, con la diplomacia más profesional de nuestro continente dice que no puede avalar unas elecciones espurias, en medio de un gobierno que llego al poder por medio del ejercito.
Las democracias más liberales y cercanas a los EEUU serán las que primeramente avalaran al ganador de las votaciones en Honduras.
Hope for Honduras
Porque un país tan pequeño, pobre y subdesarrollado con índices de pobreza inimaginables desata tantas tensiones y emociones.
El poder blando ejercido por la administración de Barack Obama, ha logrado darle largas al asunto, logrando llegar hasta los comicios hondureños, y así justificando el reconocimiento del futuro ganador de las elecciones. Manuel Zelaya a pesar de todos los errores cometidos en su administración, después de su expulsión tanto del poder como del país, al final es el presidente legitimo de los hondureños, y en cuestiones democráticas no hay soluciones a medias, debió ser restituido y no se hizo, dañando de una manera terrible a la democracia latinoamericana.
Honduras' ousted President Manuel Zelaya sleeps inside the Brazilian embassy in Tegucigalpa in this Sept. 22 photo: Lula has demonstrated Brazil's new self-confidence in the crisis over the deposed Honduran government.
Un país como Honduras con una pobreza que ronda más del 70%, que depende de la ayuda internacional, hasta para pagar a los burócratas, y mucha de esta ayuda incluyendo la militar provienen de los EEUU, es algo inadmisible que los poderes militares y ciertos sectores de la vida “democrática” de Honduras no hayan calculado y consultado por lo menos a la embajada norteamericana de sus planes de sacar a Zelaya del poder, al verlo estar cerca del presidente de Venezuela Hugo Rafael.
Lula has been trying to rein in the hotheaded Zelaya ever since the coup in Honduras.
La crisis hondureña pone a prueba la Cumbre Iberoamericana de Estoril, pone a prueba la influencia de Brasil, la influencia de los EEUU de Norteamérica, no por ser Honduras un país influyente y rico en el concierto de naciones, sino porque de ahí se definirá de hoy en adelante que es lo que nosotros verdaderamente entendemos por ser democráticos y si son estas elecciones la solución o se está sentando un antecedente peligroso.
Las elecciones de Honduras abren una brecha entre EE UU y Latinoamérica.
Créditos: Fotos BB Mundo, Der Spiegel Online.