El cantante Lluís Llach, con gorro, en la manifestación de Barcelona.
Israel es una de los países más exitosos del mundo casi en todo sentido, con un desarrollo humano y una sociedad civil muy desarrollada y un nivel de vida asombroso, ya que en apenas sesenta años ha logrado muchos éxitos, algo que pocas naciones en el mundo moderno han hecho en tan poco tiempo.
Su sociedad es muy feliz y próspera y con los problemas de la modernidad y la globalización que enfrentan todos los países del mundo.
En la primera intifada fue donde se comenzó a desarrollar algo que el mundo vería perplejo años después., los niños de la intifada se convertirían años después en terroristas que entregaban sus vidas como bombas viviente, todo esto nacido del odio extremo ante las respuestas militares de Israel a los levantamientos palestinos de esa época.
Hoy veo con estupor la operación Plomo Fundido que va a ser el nacimiento de una nueva generación de niños y jóvenes palestinos que con odio y sed de venganza al pasar el tiempo alimentaran el circulo de violencia que se vive en este momento en Gaza.
"Hay alguna posibilidad de que la invasión militar de Israel a Gaza "destroce la infraestructura terrorista" de Hamás -objetivo oficial de la operación- y ponga fin al lanzamiento de cohetes artesanales de los integristas palestinos que controlan la Franja sobre las ciudades israelíes de la frontera? Yo creo que ninguna y que, más bien, esta operación militar en la que, hasta el momento de escribir estas líneas, han muerto ya más de 600 palestinos, entre ellos gran número de niños y civiles inocentes, y causado millares de heridos, tendrá el efecto de una poda en la comunidad palestina de la que Hamás saldrá reforzada y muy disminuido el sector moderado, es decir, la Autoridad Nacional Palestina liderada por Mahmud Abbas.
Para que la razón esgrimida como justificación del ataque por Ehud Olmert y sus ministros tuviera visos de realidad, Israel debería volver a ocupar Gaza con un enorme despliegue militar permanente o perpetrar un genocidio que ni siquiera los más fanatizados de sus halcones se atreverían a asumir, ni, esperemos, el resto del mundo toleraría, aunque la opinión pública internacional ha mostrado ya más de una vez una supina indiferencia en lo que respecta a la suerte de los palestinos. La verdad de los hechos es que, por más feroz que haya sido el castigo infligido por el Ejército de Israel a Gaza, y precisamente debido al sentimiento de impotencia y odio por lo ocurrido del millón y medio de palestinos que viven hambreados y medio asfixiados en esa ratonera, lo probable es que, una vez que el Tsahal se retire de la Franja y se restablezca "la paz", las acciones terroristas se renueven con nuevos bríos y un deseo de venganza atizado por los sufrimientos de estos días.
Los defensores de los bombardeos y la invasión responden a sus críticos con esta pregunta: "¿Hasta cuándo puede resistir un país que sus ciudades sean víctimas de cohetes terroristas lanzados desde sus fronteras a lo largo de días y meses por una organización como Hamás que no reconoce la existencia de Israel ni oculta su propósito de acabar con él?". La pregunta es muy pertinente, desde luego, y nadie que no sea un fanático o un terrorista puede justificar el acoso criminal constante de Hamás contra las poblaciones civiles de Israel. Ahora bien, si se trata de buscar las causas del conflicto es, a mi juicio, deshonesto quedarse sólo allí, en los cohetes artesanales de Hamás, y no retroceder un poco más en el tiempo para entender -lo que no quiere decir justificar, claro está- lo que sucede en ese explosivo rincón del mundo.
Me pregunto si algún país en el mundo hubiera podido progresar y modernizarse en las condiciones atroces de existencia de la gente de Gaza.
"Nuestros corazones se han endurecido y nuestros ojos se han nublado", dice el periodista israelí Gideon Levy, en un artículo aparecido en el diario Haaretz el 4 de enero de 2009, comentando la incursión del Tsahal en Gaza. Como todo lo que escribe, su texto transpira decencia, lucidez y coraje. Es un lamento por esa progresiva desaparición de la moral en la vida política de su país, aquel fenómeno que, según Albert Camus, precede siempre los cataclismos históricos, y una crítica a esos intelectuales progresistas como Amos Oz y David Grossman que, antes, solían protestar con energía contra hechos como el bombardeo de Gaza y ahora, tímidamente, reflejando la involución generalizada de la vida política israelí, sólo se animan a reclamar la paz. Gracias por demostrarnos que todavía quedan justos en Israel, amigo Gideon Levy. "
La guerra como extensión de la política vemos como se juega en esta guerra quien va a gobernar a Israel en los próximos años y me pregunto cuantos muertos aguantara la silla ministerial de Israel.
Este país que ha sido un ejemplo para el mundo, la única democracia del Oriente Medio, que pocos conocen a fondo, donde no solo es guerra, es una país maravilloso y sorprendente.
Si logramos poder diferenciar al pueblo de Israel a ese Israel profundo que dista mucho de su clase política, de sus halcones, podríamos llevarnos una gran sorpresa y verdaderamente debemos tomarnos la oportunidad no solo de admirar a este sorprendente pueblo, sino desear desde lo más profundo de nuestro corazón que lo que la sociedad civil israelí vive hoy en día, sea también para el pueblo Palestino y que de una vez por todas se resuelva este problema y podamos romper ese código genético que no conoce de la paz.
Su sociedad es muy feliz y próspera y con los problemas de la modernidad y la globalización que enfrentan todos los países del mundo.
En la primera intifada fue donde se comenzó a desarrollar algo que el mundo vería perplejo años después., los niños de la intifada se convertirían años después en terroristas que entregaban sus vidas como bombas viviente, todo esto nacido del odio extremo ante las respuestas militares de Israel a los levantamientos palestinos de esa época.
Hoy veo con estupor la operación Plomo Fundido que va a ser el nacimiento de una nueva generación de niños y jóvenes palestinos que con odio y sed de venganza al pasar el tiempo alimentaran el circulo de violencia que se vive en este momento en Gaza.
"Hay alguna posibilidad de que la invasión militar de Israel a Gaza "destroce la infraestructura terrorista" de Hamás -objetivo oficial de la operación- y ponga fin al lanzamiento de cohetes artesanales de los integristas palestinos que controlan la Franja sobre las ciudades israelíes de la frontera? Yo creo que ninguna y que, más bien, esta operación militar en la que, hasta el momento de escribir estas líneas, han muerto ya más de 600 palestinos, entre ellos gran número de niños y civiles inocentes, y causado millares de heridos, tendrá el efecto de una poda en la comunidad palestina de la que Hamás saldrá reforzada y muy disminuido el sector moderado, es decir, la Autoridad Nacional Palestina liderada por Mahmud Abbas.
Para que la razón esgrimida como justificación del ataque por Ehud Olmert y sus ministros tuviera visos de realidad, Israel debería volver a ocupar Gaza con un enorme despliegue militar permanente o perpetrar un genocidio que ni siquiera los más fanatizados de sus halcones se atreverían a asumir, ni, esperemos, el resto del mundo toleraría, aunque la opinión pública internacional ha mostrado ya más de una vez una supina indiferencia en lo que respecta a la suerte de los palestinos. La verdad de los hechos es que, por más feroz que haya sido el castigo infligido por el Ejército de Israel a Gaza, y precisamente debido al sentimiento de impotencia y odio por lo ocurrido del millón y medio de palestinos que viven hambreados y medio asfixiados en esa ratonera, lo probable es que, una vez que el Tsahal se retire de la Franja y se restablezca "la paz", las acciones terroristas se renueven con nuevos bríos y un deseo de venganza atizado por los sufrimientos de estos días.
Los defensores de los bombardeos y la invasión responden a sus críticos con esta pregunta: "¿Hasta cuándo puede resistir un país que sus ciudades sean víctimas de cohetes terroristas lanzados desde sus fronteras a lo largo de días y meses por una organización como Hamás que no reconoce la existencia de Israel ni oculta su propósito de acabar con él?". La pregunta es muy pertinente, desde luego, y nadie que no sea un fanático o un terrorista puede justificar el acoso criminal constante de Hamás contra las poblaciones civiles de Israel. Ahora bien, si se trata de buscar las causas del conflicto es, a mi juicio, deshonesto quedarse sólo allí, en los cohetes artesanales de Hamás, y no retroceder un poco más en el tiempo para entender -lo que no quiere decir justificar, claro está- lo que sucede en ese explosivo rincón del mundo.
Me pregunto si algún país en el mundo hubiera podido progresar y modernizarse en las condiciones atroces de existencia de la gente de Gaza.
"Nuestros corazones se han endurecido y nuestros ojos se han nublado", dice el periodista israelí Gideon Levy, en un artículo aparecido en el diario Haaretz el 4 de enero de 2009, comentando la incursión del Tsahal en Gaza. Como todo lo que escribe, su texto transpira decencia, lucidez y coraje. Es un lamento por esa progresiva desaparición de la moral en la vida política de su país, aquel fenómeno que, según Albert Camus, precede siempre los cataclismos históricos, y una crítica a esos intelectuales progresistas como Amos Oz y David Grossman que, antes, solían protestar con energía contra hechos como el bombardeo de Gaza y ahora, tímidamente, reflejando la involución generalizada de la vida política israelí, sólo se animan a reclamar la paz. Gracias por demostrarnos que todavía quedan justos en Israel, amigo Gideon Levy. "
La guerra como extensión de la política vemos como se juega en esta guerra quien va a gobernar a Israel en los próximos años y me pregunto cuantos muertos aguantara la silla ministerial de Israel.
Este país que ha sido un ejemplo para el mundo, la única democracia del Oriente Medio, que pocos conocen a fondo, donde no solo es guerra, es una país maravilloso y sorprendente.
Si logramos poder diferenciar al pueblo de Israel a ese Israel profundo que dista mucho de su clase política, de sus halcones, podríamos llevarnos una gran sorpresa y verdaderamente debemos tomarnos la oportunidad no solo de admirar a este sorprendente pueblo, sino desear desde lo más profundo de nuestro corazón que lo que la sociedad civil israelí vive hoy en día, sea también para el pueblo Palestino y que de una vez por todas se resuelva este problema y podamos romper ese código genético que no conoce de la paz.
Para comprender mejor El Sionismo, leer el blog de Gonzo
Créditos: Morir en Gaza, El País. MARIO VARGAS LLOSA
21 comentarios:
A mi me parece como lo indicas que ese conflicto va a tener un resultado positivo únicamente si alguien se encarga de ese pequeño e incomodo trozo de tierra.
A estas alturas pensar que israel se va a ir de los territorios y con eso va a conseguir la paz es soñar y soñar bien alto
Y no quiero estar al lado de los niños iraquis ni de estos niños palestinos en unos 5 o 10 años, a EEUU e Israel les va esperar un futuro duro en este sentido.
Roche:
Es muy duro ver como se siembra la semilla del odio en esta niñez y adolescencia.
Yo vi. un documental israelita donde niños israelitas y palestinos convivían juntos, y se llegaban a querer mucho, es impresionante ese documental que en este momento no se como se llama, no lo recuerdo.
Pero el fantasma de la guerra y del odio hoy recorren Oriente Medio como Pedro por su casa y el futuro no nos da una luz de esperanza ante el odio y el dolor infringido.
Pero yo diferencio al pueblo de Israel de sus políticos a como diferencie al pueblo norteamericano del gobierno desastroso de G. W. Bush, pero como bien dices vienen tiempos muy difíciles.
Saludos
Cuanta razón Roy
Odio con odio se paga, y se cierra una maldita espiral, que sólo trae dolor.
Digo amen a tus deseos...ojala que allá arriba alguien te escuche.
Un abrazo
Gizz
Gizela:
La espiral de la violencia es algo horrible como que no tiene fin, hay que esperar algo nuevo en Oriente Medio, para ver si se logra romper esa espiral, creo que logrando la creación de un Estado palestino, moderno y un desarrollo de su sociedad civil se podría a empezar a tener una esperanza de paz, ya que los grupos alzados en armas ya no tendrían la excusa de estar en guerra perpetua contra Israel.
La paz tiene un costo y hay que pagarla.
Saludos
ningún país es de mierda!!1
y más tontos son los que caen en ese eco
así no se construye PAZ
lo único que se hace es profundizar aún más la herida y no dejar que sane
así cuando habrá PAZ ...este tipo de exabrutos no hacen más que generarle más riqueza a los señores dueños de las tecnologías que crean y que fabrican armas a través del mundo...con este tipo de expresiones lo único que hacemos es darle tribuna a que ellos sigan aumentando su poder
es mi opinión
allí o en otro lado del planeta , ya hau esperando otro conflicto por explotar ,y todo para qué?
para que les demos tribuna y sobretodo dependamos de ellos para terminar .
exabruptos por exabrutos fe erratas)
Roy: recuerdo ese documental y es como un oasis en medio del conflicto.
Tambien hay que aclarar que los medicos de Gaza trabajaban en conjunto con los medicos israelies hasta que estallo este conflicto, era un gran ejemplo tambien. Se trasladaban los pacientes de un lado a otro sin problemas, increible.
Cuando estuve en Israel, en un hotel de Tel Aviv, recuerdo que los empleados eran arabes musulmanes, y en la tele del hall estaban dando un partido de futbol, me quede con algunos amigos a mirarlo y estaban los arabes, nos pusimos a hablar como si nada y estaba todo bien.
Ojala alcanzemos la paz algun dia!!!
Al fin y al cabo son nuestros unicos hermanos semitas que hay.
UNA NOTA INTERESANTE:
Fundamentalismo y competencia de la muerte
José Antonio Ardila Acuña
ECONOMISTA Y DOCENTE UNIVERSITARIO
Desde que se inició la segunda intifada, en septiembre de 2000, hasta noviembre de 2008, los grupos terroristas palestinos habían ejecutado cerca de 200 ataques suicidas y asesinado a 6600 "civiles" israelíes. Entre éstos, aproximadamente 500 mujeres y 300 niños.
Pareciera que existiera una competencia de la muerte entre los grupos de fanáticos fundamentalistas para lograr el mayor número de víctimas. Hamas, en 72 atentados, ultimó 1,410 israelíes y Fatah, de Abu Mazen, en 42 "acciones", 1437. Las demás víctimas se las "reparten", en esa competencia, la Jihad Islámica, las Brigadas de Resistencia Popular, el Frente Popular y el Democrático. Tremendos adjetivos calificativos estos últimos.
Cualquier banda de forajidos que levante el estandarte del antisemitismo, de la judeofobia y del desprecio hacia Israel es, inmediatamente, registrado con el calificativo de "revolucionario"; por eso, nunca he visto manifestación alguna, ni leído declaración o resolución que condenara el crimen contra esos inocentes.
¿Dónde estaban los que gritan que el estado de Israel comete genocidio contra los palestinos? ¿Será que el exterminio o eliminación sistemática de judíos no es genocidio? ¿Dónde estaban esos que vociferan por la defensa de los derechos humanos? ¿Será que los judíos no son humanos? ¿Dónde estaban esos "izquierdistas" que niegan la legitimidad del Estado de Israel, los que olvidaron las enseñanzas de Lenin (o nunca las estudiaron), sobre el derecho de las naciones a su autodeterminación y la coexistencia pacífica? Lo único que tienen de izquierda son sus manos siniestras con las que ocultan lo que hacen las derechas. Sí, porque con su demagogia "izquierdizante", su antisemitismo, su judeofobia, su odio a la existencia del Estado de Israel, en nada se diferencian de las hordas hitlerianas.
Ninguno de los aludidos se pregunta por qué cuando el ejército israelí responde a los ataques de los terroristas mueren civiles y niños palestinos. Mueren porque los usan como escudos humanos en las escuelas, las mezquitas, lugares públicos, los barrios, para refugiarse y esconder su arsenal.
¿Son acaso de izquierda quienes con rostros cubiertos mantienen a la población intimidada; los que cantan a la guerra; los que abrazan fanáticamente la religión para materializar la opresión popular y mantener a la gente en el oscurantismo; los que no creen en una sociedad plural y respetuosa, en la que tanto creyentes como no puedan estar integrados en ella; los que excluyen a las mujeres de la actividad social?
El éxito de la propaganda fundamentalista islámica es haber intoxicado a los "izquierdistas" del viejo y nuevo continente con el discurso podrido de que israelí es sinónimo de nazi y que los judíos son cómplices de ese crimen que es Israel.
Por mi parte, seguiré creyendo en la autodeterminación de los pueblos (llámense israelí o palestino); en el derecho a la vida que tiene todo individuo independientemente de su color, su posición social, su creencia religiosa; en la coexistencia pacífica.
Seguiré en desacuerdo con los bombardeos a poblaciones civiles en cualquier región del mundo.
Seguiré creyendo en la PAZ y en el derecho a existir de Israel.
Como siempre, ante CUALQUIER crimen o atrocidad cometida por el Estado nazi-sionista de Israel en contra de la población civil en Gaza, Cisjordania o Líbano, nunca falta algún fanático invocando el fantasma del ''antisemitismo'' para justificarlo.
Estoy seguro de que, si los dirigentes israelíes decidieran mañana exterminar a toda la población palestina, esos mismos extremistas llenos de odio lo apoyarían sin dudarlo...
Roy, paso a saludare y a pedirte que pases por mi blog, o por el de Cornelivs, anda caminando una iniciativa muy linda que estoy segura, queras acojer y además promocionar entre tus importantes lectores.
Si pinchas la imagen de Manifiesto, te llevará a la explicación
Un abrazo
Gizz
Bueno Jerry ya esta desvariando veo. La atrocidad de los palestinos esta buena no? lea las estadisticas de arriba y de su opinion a eso.
Le respondi en el otro post hace dias y ni noticias de usted.
Saludos!
Elisa:
Se titula así por la forma despectiva en que han usado ese termino contra Israel. El problema es ese choque de civilizaciones y la intolerancia.
Saludos
Gizela:
Muchas gracias.
Saludos
Jonathan:
Algo se tiene que hacer para resolver este problema tan antiguo, demasiadas muertes.
Saludos
Precisamente, por ser una democracia, uno esperaría que le pasaran la factura política a los responsables por este tipo de acciones... sino, sólo cabe suponer que la mayoría está de acuerdo con las mismas...
Esto ha generado todo un proceso negativo, una guerra de nunca acabar y en la que todos perdemos de una u otra forma.
Me ha gustado tu enfoque.
Un abrazo colmado de buena vibra para tí en este 2009!
Terox:
Una encuesta en Israel muestra que el 90% de la población esta de acuerdo con la Operación, yo creo que el tiempo nos dirá si la silla de primer ministro valió la pena tantos muertos y un daño humano que pasaran décadas en sanar.
Hoy Israel hace un alto al fuego unilateralmente y concuerda con la ya casi salida de G. W.Bush, sorprendente.
Saludos
Lulu desnuda:
Es una espiral de violencia interminable y agotador y han abierto las venas al máximo al lado Palestino. Doloroso y muy real.
Saludos
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