Un tanque israelí patrulla la zona fronteriza cerca de Netiv Haasara, en el norte de la Franja de Gaza.
"Los palestinos atraerán sobre sus cabezas un Holocausto"
El viceministro de Defensa israelí usa el término del exterminio fuera del contexto del genocidio nazi para advertir a Hamás por sus ataques con cohetes.
El viceministro de Defensa israelí, Matan Vilnai, ha advertido hoy a los palestinos de que provocarán un "holocausto mayor" contra sí mismos si continúa y se intensifica el lanzamiento de cohetes contra Israel desde la franja de Gaza.
"Cuanto más se intensifique el fuego y los cohetes alcancen una distancia mayor, ellos (los palestinos) atraerán sobre sus cabezas un Holocausto porque emplearemos todo nuestro poder para defendernos", ha dicho Vilnai en declaraciones hechas a la radio púbica israelí.
Distintos analistas destacan que el término 'holocausto' -shoa en hebreo- raramente se usa en Israel en un contexto que no sea el del genocidio nazi contra los judíos durante la Segunda Guerra Mundial. Además, estas declaraciones se producen en medio de los llamamientos de varios políticos israelíes para lanzar una operación de envergadura contra la franja de Gaza con el objetivo de "erradicar al Gobierno de Hamás".
Por su parte, un responsable de Hamás, Sami Abu Zuhri, ha afirmado tras enterarse de los comentarios de Vilnai que "nos estamos enfrenando a nuevos nazis que quieren matar e incinerar al pueblo palestino".
Durante los últimos dos días, los ataques aéreos israelíes contra la Franja de Gaza, controlada por Hamás, han causado la muerte de 32 palestinos, incluidos cinco niños. Israel alega estar respondiendo al lanzamiento de cohetes por parte de los milicianos que mataron el pasado miércoles a un israelí en la ciudad de Sderot.
En mi opinión: hay que poner en duda la predisposición palestina a lograr una convivencia pacífica con Israel basada en un Estado propio en fronteras similares a las anteriores a la Guerra de los Seis Días de 1967. Si de verdad fuese ése el objetivo palestino, hace ya tiempo que se hubiera logrado. Vemos este conflicto el de nunca acabar, se está acercando a un punto en que los parlamentarios israelitas ya piden una operación contundente.
El Ejército israelí ha respondido con fuerza a los ataques y ha lanzado una ofensiva, "no hay duda de que la respuesta en materia de seguridad requiere un componente terrestre".
El diputado Tzaji Hanegbi, de Kadima y jefe de la Comisión parlamentaria para Exterior y Defensa declaró que "el Estado de Israel debe tomar la decisión estratégica de ordenar al Ejército prepararse rápidamente para tumbar al régimen terrorista de Hamás y tomar todas las zonas desde las que se disparan cohetes".
Es ya casi un hecho una incursión terrestre y los terroristas estan esperando este paso del más poderoso ejército de Oriente Medio, para hacerle morder el polvo, y como se dijo en un post anterior, el ejército israelita debe tener totalmente claro, que para poder entrar en esa zona, debe estar seguro de cómo salir.
La actitud israelí de no ingresar a Gaza es interpretada como miedosa, no como cauta y sensata, por parte de los integristas palestinos.
El Gobierno israelí ya entiende que no podrá demorar por mucho tiempo más una acción de grandes proporciones para evitar el constante bombardeo del Néguev Occidental.
En ambos frentes, el militar y el diplomático, Hamás no será pasivo. Por el contrario, está haciendo todo lo posible para lograr que Israel invada, porque supone que eso es lo que le dará todas las soluciones: le permitirá resistir el ataque en forma no menos heroica que Hezbollah en el Líbano, desprestigiará a Israel porque obligará a que ataque centros civiles, y pondrá fin al aislamiento internacional porque al menos los países árabes se verán obligados a acudir en ayuda de sus heroicos hermanos.
Después de todo, como dice Amos Oz, una acción en Gaza nos costará muchas más víctimas que las que se cobraron los proyectiles de Gaza durante los últimos siete años.
Eso por sí solo no debe impedir la acción, porque todas las guerras, incluidas las más justas, cobran más víctimas que las que había antes de que estallaran. El orden de cosas es que el Ejército se sacrifica para que los civiles puedan vivir, y no al revés. El problema no es que morirán soldados, sino que esa muerte no impedirá la de los civiles en Sderot.
En resumen, sólo cuando tenga claro cómo salir, Israel podrá permitirse entrar. Y que quede claro para la próxima comisión investigadora: esa decisión es y debe ser responsabilidad exclusiva de la Comandancia Civil, es decir, del Gobierno.